El presidente ruso llegó en helicóptero, en el Donbass, e hizo un recorrido por la ciudad conduciendo él mismo un vehículo.
Los discursos de los presidentes de Rusia y Estados Unidos del 22 y el 23 de febrero han puesto en claro el inicio de una nueva y previsiblemente muy extensa Guerra Fría.
El mandatario estadounidense dijo en Polonia, al cumplirse un año de la guerra en Ucrania, que se avecinan "días duros y amargos".
El próximo 24 de febrero habrá pasado un año del inicio de las acciones bélicas de Rusia en Ucrania, sin que se avizore hasta el momento una definición del conflicto a mediano plazo.
Los bombardeos rusos obligaron a evacuar hospitales en Jerson. La ofensiva de los últimos días dejó sin servicios a importantes ciudades.
La ayuda financiera será por 18.700 millones de dólares para 2023. Tendrá carácter de préstamos cuyos intereses lo cubrirán los Estados miembros.
Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN, cree que el misíl que cayó a Polonia fue "probablemente" lanzado por las defensas antiaéreas de Ucrania.
El encuentro concluyó con una "condena firmemente" a la guerra en Ucrania, en medio de tensiones por la caída de un misil en Polonia.
El primer ministro convocó a la Comisión de Seguridad Nacional. Rusia, señalada como responsable, dijo que la acusación es una "provocación".
Líderes de países que integran la Unión Europea condenaron como un "crimen de guerra" los ataques de Rusia contra Kiev y otras ciudades de Ucrania.
Los cuatro territorios crean un corredor terrestre crucial entre Rusia y la península de Crimea, que fue anexada por Moscú en 2014.
Se trata de las provincias de Lugansk, Donetsk, Zaporiyia y Jerson. Ucrania y sus aliados occidentales tildaron a los referendos como una "farsa".