Castillo: el nuevo presidente para una definitiva independencia de Perú

El inicio del nuevo proceso democrático peruano desde la visión de Nicolás Lynch Gamero, un relevante intelectual y activo participante en la política peruana del siglo 21.

Ed Impresa30/07/2021 Flavio Colazo
Lynch Gamero © Goethe
Lynch: “Mi esperanza es que castillo opte por ser fiel a sus principios”.

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Especial para La Nueva Mañana

En días en que el país andino se encuentra conmemorando sus 2 siglos de independencia, La Nueva Mañana entrevistó al sociólogo peruano Nicolás Lynch Gamero, quien ha sido funcionario gubernamental de las administraciones de Alejandro Toledo (ministro de Educación en 2001) y de Ollanta Humala (embajador de Perú en Argentina - 2011-2012-). También -desde hace 40 años- es profesor en la Universidad Nacional de San Marcos.

Los candidatos de la segunda vuelta eleccionaria para elegir presidente de Perú llegaron con un exiguo caudal de votos cada uno. ¿Cuál de los sendos arribos a dicha segunda vuelta sorprendió más?

- El que más sorprendió al conjunto de analistas políticos, lógicamente, fue Pedro Castillo; porque en la campaña de primera vuelta no fue valorado en su real dimensión. Él hizo una gran elección, tanto en primera como en segunda vuelta, si bien la diferencia final ha sido escasa -cerca de 40.000 votos-, el salto de Castillo, de pasar de ser un candidato prácticamente desconocido a finalmente, ganar la contienda, yo creo que es espectacular.

¿Por qué ganó Castillo en ambas vueltas?

- Porque Castillo levantó los temas centrales que revelan el agotamiento de un régimen político vigente hasta su llegada, y presentó a la vista de la ciudadanía los verdaderos temas de fondo y estructurales, que son los grandes causales de la mala situación económica y social que vive Perú.

¿A qué atribuye usted la gran demora que hubo para proclamar a Castillo como presidente?

- El presidente Castillo va a enfrentar a enemigos poderosos. La derecha peruana le ha prometido guerra…, y se la va a dar desde el primer día, de eso no cabe la menor duda. La demora en su proclamación responde a esa intención.

¿El destino de Castillo, de cuáles aspectos depende?

- Castillo va tener dos opciones: o se convierte en un traidor como Ollanta Humala -quien en su primer año de gobierno abandonó todas las banderas progresistas que lo condujeron a la presidencia-, o deberá ser consecuente con su agenda electoral, y llevar adelante las transformaciones que Perú necesita.

Castillo levantó los temas centrales que revelan el agotamiento de un régimen  político.


¿Cuáles son los asuntos urgentes que debería asumir la nueva administración? 

- Creo que los asuntos primordiales hoy por hoy son dos: la convocatoria a una Constituyente -que es un proceso que ya se inició en las calles-, y para lo cual el primer paso sería convocar a un referéndum para ver si hay aprobación para asumir la confección de una nueva Constitución. Si el referéndum fuera positivo entonces deberá convocar a una Asamblea Constituyente. Y el otro temaprimordial es el cambio del modelo económico. Nosotros tenemos un modelo que ha llevado al país a un sistema de falencia, de quiebra, este modelo solo ha sido muy bueno para dos docenas de grupos económicos y muy malo, o pésimo, para el 80% de los peruanos. Antes de la pandemia Perú tenía un 75% de trabajo informal, lo que ustedes llaman trabajo en negro, y hoy, en pandemia, ha trepado hasta cerca del 90%. O sea que el empleo con derechos prácticamente no existe en Perú, lo cual ha llevado a la gran mayoría de los peruanos a una situación de hambre y de crisis sanitaria, entonces… sí, hay que cambiar el modelo enfrentando a la emergencia, no son cosas distintas, es una- y son- la misma cosa.

En tanto ex ministro de Educación… ¿cómo evalúa la situación actual en ese campo?

- Para mí es muy claro lo que hay que hacer. En los últimos 8 años esta serie de gobiernos neoliberales finalmente lograron armar e imponer en el sector educativo sus políticas que apuntan a terminar con la educación pública, tanto en el nivel básico como universitario. Yo soy profesor universitario desde hace 40 años en la universidad más grande del país, y soy testigo de primera mano de esta situación. Hay un proceso de privatización en marcha que hay que revertir, y hay que poner en primer lugar las necesidades de la educación básica delante de todo, deteniendo la aniquilación del trabajo público magisterial, que era lo que pretendía el neoliberalismo; también urge frenar las privatizaciones de las universidades nacionales. Ojalá que el personal que Castillo disponga para atender a esta situación sea el mejor, el más idóneo y el más determinado.

¿Cuál piensa que debería ser el alineamiento internacional de Perú a partir de la nueva administración; y cuál piensa que finalmente será?

- Perú hace tiempo ha dejado de tener Cancillería, hemos dejado de tener Ministerio de Relaciones Exteriores, nuestra Cancillería ha sido en los últimos años prácticamente una mesa de partes del Departamento de Estado de EE.UU. Tiene que terminar esa subordinación al Imperio del Norte, y pasar de una política colonial -que lleva más de 30 años-, a tener una política nacional, en términos de relaciones exteriores. Esto supone, por supuesto, salirse de inmediato de los grupos perniciosos presentes en América latina, como el mal llamado Grupo de Lima, e impulsar la integración regional mediante organismos como Unasur, por ejemplo, y colaborar para una salida democrática al problema venezolano respetando, por supuesto, su soberanía y la capacidad de decisión del pueblo venezolano.

¿Cuáles son sus expectativas para este nuevo proceso democrático en Perú?

- Que Castillo opte por ser fiel a sus principios y cumpla con su programa de campaña, con sus compromisos electorales, esa es mi esperanza. Si lo hace, y avanza en la convocatoria a una Asamblea Constituyente; si enfrenta a los problemas inmediatos con recetas novedosas, buscando cambiar el modelo económico; si avanza en un alineamiento internacional distinto al actual para Perú, entonces habrá abierto un camino de democratización que es lo que este pueblo desea para poder juntarse con otros pueblos de otros países que yalo vienen recorriendo desde hace algún tiempo. 

Han coincidido los días en que se conmemora el bicentenario de la independencia de Perú con la proclamación de Castillo… ¿Tiene alguna reflexión personal al respecto?

- Perú vive la maldición de Abascal, el último virrey español que reprimió los diferentes movimientos independentistas y nos dejó una clase domínate, una elite, que a pesar de la independencia formal del país, –la cual se conmemora el 28 de julio-, nos legó una sociedad colonial que en buena medida permanece hasta el día de hoy. Castillo debe intentar superar esa situación de independencia frustrada que lleva ya 200 años.

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