“Buscamos poner equilibrio entre los inquilinos y los propietarios”

Especial para La Nueva Mañana

La Cooperativa de Inquilinos de Córdoba (CoopinCo) nació para “crear fuentes de trabajo”, para “luchar por los derechos de las inquilinas e inquilinos, tanto de hogares como de los comercios y las pymes” y para “concientizar sobre las virtudes del trabajo cooperativo”.

“En 2016, cuando se profundizó la crisis económica con la devaluación, el aumento de los servicios y la inflación, se agudizó también la preocupación de los inquilinos que ya no llegábamos a fin de mes. Las cosas se venían agravando cada vez más y los reclamos de los inquilinos no eran escuchados”, le contó Armando Carlos García Gallardo, miembro de la CoopinCo, a La Nueva Mañana.

“Somos 27 personas que elegimos conformar una cooperativa de trabajo por la participación horizontal en la toma de decisiones, porque nos permite realizar trabajos para solventarnos y por la flexibilidad que tiene en cuanto a que permite llevar adelante reclamos sociales. Encontramos en la cooperativa una forma de organización versátil y flexible para hacer las dos cosas. Así que en abril de 2018 conformamos la cooperativa de trabajo para brindar servicios y a su vez para hacer los reclamos que consideramos justos”, dijo García Gallardo.

–¿Cuáles son los servicios que brindan desde CoopinCo?

–Los servicios están centrados en lo que puede necesitar un inquilino, pero también el público en general: asesoramiento jurídico en materia de contratos de locación, pintura, plomería, electricidad, albañilería, cerrajería, textiles, sanitarios, desinfecciones, limpieza de tanques, fletes y mudanzas, jardinería y floricultura, reparaciones de PC, diseño web.

–¿Cuáles son los principales reclamos que llevan adelante desde la cooperativa?

–Buscamos impulsar la Ley de Alquileres y la creación del Ministerio de la Vivienda. La problemática de fondo es el tema de la vivienda y de los alquileres. Hay mucha demanda y poca oferta, lo que se traduce en una asimetría de fuerzas entre los inquilinos y los propietarios y sus intermediarios, como son las inmobiliarias. La idea es poner un poco de equilibrio entre las partes. Hay un proyecto de Ley de Alquileres que tiene media sanción en el Congreso pero que nunca se trató seriamente. Comprar una casa hoy es imposible, sobre todo para la clase media, media baja, que no puede acceder a las viviendas sociales, que no tiene ingresos como para comprarse una y sacar un crédito es imposible. Estos últimos años la situación de los inquilinos se ha vuelto desesperante: los impuestos, las expensas, los servicios.

–Ustedes mandaron una carta a los candidatos a diputados del Frente de Todos. ¿Cuál fue la intención?

–Sí, mandamos una carta para que nos brinden su apoyo a la hora de impulsar la Ley de Alquileres en el Congreso y para la creación del Ministerio de la Vivienda. Recibimos su compromiso para impulsar ambos proyectos. Fue el ámbito donde encontramos mayor apertura, porque hay sectores que sienten como una amenaza la promulgación de una Ley de Alquileres, aunque no intenta perjudicar a nadie sino nivelar un poco esa inequidad de poder entre los inquilinos y los propietarios.

–El 27 de octubre habrá elecciones y todo indica que cambiará el signo político a nivel nacional. ¿Qué esperan de una posible administración de Alberto Fernández?

–La carta que mandamos lleva la intención de que una vez que cambie el gobierno haya un impulso en la mejora de la situación de los inquilinos. Es muy importante que salga la Ley de Alquileres. En estos casi cuatro años prácticamente no se hizo nada para mejorar la situación de los inquilinos. Y en el gobierno anterior, de Cristina Fernández, no hubo grandes cambios. Todo esto llevó a los inquilinos a una situación insostenible. Gran parte de la población alquila y en lo últimos 40 años aumentó: aproximadamente un 27 por ciento de la gente alquila. En las grandes ciudades el porcentaje es mayor.

–¿Cuáles son las virtudes del trabajo cooperativo?

–Nuestra cooperativa es particular porque no somos un grupo de trabajadores que conformamos la cooperativa luego de la quiebra de una empresa, por ejemplo, sino que nos juntamos por una problemática particular de la vivienda y de los inquilinos. La visión de la cooperativa es que los trabajadores tengamos una participación más amplia que con otro tipo de organización, lo que la hace que sea una de las formas de organización más democráticas que existe.

–¿Se relacionan con otras cooperativas o agrupaciones cooperativistas?

–Formamos parte del Instituto para el Financiamiento de Cooperativas de Trabajo y de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo. También articulamos con el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, con la Universidad Nacional de Córdoba, con el Conicet y con el Centro Experimental de la Vivienda en cuestiones relativas a capacitaciones como cooperativa y en relación a la problemática de alquileres y al acceso a la vivienda, siempre desde una perspectiva de género, desde el feminismo, formando parte de la economía solidaria y popular de Córdoba.

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