Curas pederastas en Mendoza: El “Padre Nicolás”, crónica de un abusador denunciado

El cura Nicola Corradi, uno de los detenidos por abuso sexual infantil en el Instituto Antonio Próvoro de Mendoza, tenía denuncias desde 1984 en Italia. Fue trasladado a Argentina por el mismo Instituto que tiene sedes en distintas partes del mundo.

Córdoba 29/11/2016 Consuelo Cabral Consuelo Cabral
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En el 2015 Julieta Añazco, integrante de la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesial, denunció a Nicola Corradi en Washington.

Nicola Corradi tenía 50 años cuando envuelto en uno de los mayores escándalos de la iglesia italiana, fue trasladado desde Verona a Argentina. La causa: abuso sexual reiterado de menores sordos en el Instituto Antonio Próvolo para Niños Sordos.

Como si los delitos cometidos por el cura fueran a diluirse en las aguas del Atlántico, las autoridades del Instituto italiano, se contactaron con sus pares argentinos para reubicar a Corradi.

De esta manera fue que el sacerdote italiano, quien en aquel entonces tenía 50 años y serias denuncias por pederasta, cruzó el océano, llegó a Mendoza y se convirtió en el “Padre Nicolás”. 

Un acuerdo previo entre los directivos de las distintas sedes del Instituto Antonio Próvolo en Verona, Mendoza y La Plata fue lo que posibilitó su desembarcó en Luján de Cuyo.  Eso explica que Nicola Corradi, acusado junto a otros 130 sacerdotes de abusar sexualmente de niñas y niños sordos entre 1955 y 1984, en la sede que el Instituto tiene en Verona, se haya convertido en el "Padre Nicolás". 

Además de Corradi, a la Argentina llegaron otros sacerdotes con similares denuncias, que fueron asignados a la sedes que el Instituto Antonio Próvolo tiene en San Juan de Cuyo y en La Plata.

En el 2015, Julieta Añazco denunció en la Conferencia Anual de la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico realizada en Washington, los delitos cometidos en Italia por los sacerdotes Ricardo Giménez, Jorge Luis Morello, Justo José Ilarraz, Luis Brizzio, Rubén Pardo, Osvaldo Ramírez, Félix Alejandro Martínez, Nicolás Bruno Corradi, Alejandro Squizziatto, Raúl del Castillo y José Rohr.

En esa oportunidad, Julieta reveló que “se cometieron violaciones, masturbaciones obligadas por curas y relaciones de sodomía cometidas en los dormitorios. Los curas involucrados fueron aproximadamente 130. Algunos de ellos fueron trasladados a la Argentina, particularmente a La Plata y Mendoza”.

Julieta fue abusada por el cura de La Plata, Ricardo Giménez. Otra atrocidad que podría haberse evitado de no existir una red de encubrimiento y traslado de sacerdotes abusadores.

“Ayelén” se cansó de gritar por dentro y decidió romper el silencio que la acompañó desde su nacimiento. Nicolás Corradi y Horacio Corbacho, los curas acusados de abusar desde el 2007 de al menos 12 niños y niñas en el Instituto Antonio Próvolo de Luján de Cuyo, Mendoza, no imaginaron lo fuerte que pueden ser las palabras, aún viniendo de una persona con dificultades para hablar. El silencio no es de quienes nacieron sin poder oír. El silencio es de los cómplices.

Los casos más resonantes de curas pederastas en Argentina

Julio César Grassi, director de la Fundación Felices Los Niños, condenado a 15 años de cárcel por abuso sexual infantil, luego de 22 años de recibida la primera denuncia en su contra, en 1991. En el 2014 el director de hogares de la Fundación Felices los Niños, Juan Manuel Casolati, lo denunció por robar comida de los niños y las donaciones de la Fundación, para pagar prebendas y solventarse una vida de lujo en prisión mientras los niños pasan necesidades y viven en pésimas condiciones.

Basta con ingresar a la página web www.causagrassi.org, donde quiénes visitan el sitio pueden acceder a una trivia en base a la pregunta: “Padre Grassi ¿Inocente o culpable”. Las posibles respuestas, como si se tratara de un juego, son: “Inocente”, “Culpable”, “No tengo opinión”. Luego de seleccionar una de las opciones, se pueden ver los resultados que indican: 18.504 votos a favor de su inocencia, 6.647 lo consideran culpable y 1.292 no tienen una opinión. La limpieza de lo atroz se sirve de todos los canales posibles.

El hogar del Padre Aguilera, Córdoba. 2012. Lucas Gabriel Peralta y Juan Carlos González fueron condenados a 8 y 10 años de prisión por ser encontrados culpables de abuso sexual con acceso carnal continuado en perjuicio de dos menores de edad que estaban alojadas en la Casa del Niño del padre Aguilera, en Unquillo.

Diego Escobar Gaviria. Nogoyá, Entre Ríos. 2016. Monjas de la congregación Terciarias Misioneras Franciscanas denunciaron al sacerdote colombiano Diego Escobar Gaviria ante el defensor oficial de la justicia de Nogoyá, Oscar Eduardo Rossi,  por abusar de un niño de 11 años en reiteradas ocasiones.

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