Le dieron perpetua por asesinar de 22 puñaladas a su ex mujer

Cristian Halliú fue condenado este miércoles por el brutal crimen de Cintia Laudonio ocurrido en marzo de 2016, al frente de sus hijos, en la localidad bonaerense de Castelar.

País22/11/2017 Redacción La Nueva Mañana
Cintia Leudono

Este miércoles la Justicia condenó a Cristian Halliú a prisión perpetua por asesinar a CIntia Laudonio, su ex mujer, de 22 puñaladas en marzo de 2016 en la localidad bonaerense de Castelar.

La Justicia lo condenó como autor del delito de "homicidio calificado por el vínculo" de Laudonio de 34 años, con quien tenía un hijo y quien lo había denunciado por violencia de género.

Los jueces Pedro Rodríguez, Juan Carlos Torti y Rodolfo Castañares dieron a conocer la sentencia la mañana del miércoles en una audiencia pública realizada en la sede judicial ubicada en Colón 1708 de ese partido, y coincidieron con lo que habían solicitado los fiscales Hernán Moyano y Florencia Demasi en sus alegatos del pasado 15 de noviembre.

La abogada particular María Inés Terrizzano, representante de la familia de Laudonio como particular damnificado, había pedido la misma pena y por el mismo delito.

Por su parte, la defensa oficial del imputado había requerido la absolución por falta de pruebas y, subsidiariamente, la pena mínima por "homicidio simple", que es de ocho años de prisión.

Tras los alegatos de las partes, Halliú, quien al momento del crimen trabajaba como supervisor de ventas de electrodomésticos en Carrefour, pronunció palabras y de pie, afirmó al tribunal: "Soy inocente".

El sangriento asesinato ocurrió cerca de las 4.20 del 6 de marzo de 2016, en una casa situada en Curuchet al 1600, en Castelar, partido de Morón, donde la mujer descansaba junto a sus tres hijos, dos niñas de 8 y 10 años y un varón, de 3. Este último, fruto de su relación con Halliú.

De acuerdo con la investigación, el asesino arribó al lugar, saltó las rejas de hierro del frente de la vivienda y luego violentó una ventana para poder entrar al inmueble.

Una vez dentro de la casa, el agresor sorprendió a Laudonio en la habitación en la que dormía, la apuñaló 22 veces y escapó, mientras que la mujer alcanzó a llegar hasta el baño, donde cayó desvanecida y falleció.

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