La legisladora afirma que la coalición debe definir las candidaturas. Qué piensa la única mujer dispuesta a hacerle fuerza a Mestre y De Loredo para llevar al PRO a la Capital.
Ed Impresa 06/01/2019 César Pucheta
Los cuarenta grados de sensación térmica que derriten el centro cordobés durante las primeras horas del 2019 no parecen ser una variable a tener en cuenta en los albores de los días por venir en el escenario social y político de la provincia. Es 2 de enero y Soher El Sukaría almuerza en su oficina de la unicameral. “Va a ser un año desafiante, con mucho compromiso y trabajo” dice al recibir a La Nueva Mañana.
El calendario electoral se aceleró de repente y las vacaciones de dirigentes y asesores quedaron suspendidas hasta nuevo aviso. La legisladora del PRO no reniega de eso, entiende que son parte de las reglas del juego aunque todavía esté sorprendida por el adelantamiento de los comicios que define como “una decisión riesgosa” incluso para las intenciones del Gobernador.
“Córdoba tiene falencias visibles y esas cosas ya no se esconden, a pesar del marketing y la pauta publicitaria” dice. Entiende que las elecciones de medio término del 2017 y las elecciones del 2018 en Marcos Juárez marcaron los hitos a repetir en este 2019 y que es totalmente posible conseguirlo, más allá de lo que digan las encuestas y los análisis previos. En ambos casos, recuerda, “todos los medios vendían que Unión por Córdoba ganaba “cómodo” y se anticiparon victorias que al final fueron derrotas muy pronunciadas”. Además, agrega: “El calendario también contempla una seguidilla de inauguraciones que no dependen sólo del gobierno sino que involucra a factores tan inmanejables como lo es el clima. Yo entiendo que es un movimiento político muy arriesgado que los puede llevar a pagar un costo muy alto”.
¿Cómo ve la decisión de Mestre de pegar las elecciones de la capital con las de la provincia?
-Fue una decisión absolutamente personal del Intendente y yo entiendo que debería haber sido conversada con todas las fuerzas de la coalición. Es Cambiemos quien pelea la elección tanto a nivel provincial como a nivel local. Pero ya está, ahora hay que trabajar para ganar.
¿Es posible un acuerdo para definir las candidaturas en Cambiemos?
-Sí, yo creo que hay que ir a un acuerdo. Es cierto que muchas veces las definiciones para la ciudad quedan muy supeditadas a lo que se defina a nivel provincial y seguramente eso pasará de cara a mayo. Pero yo creo, trabajo y apuesto a que exista un consenso para llevar las mejores propuestas que representen a Cambiemos en ambas elecciones. También tengo en claro que si no fuese fructífera la mesa de negociación, siempre es legítimo y democrático dirimirlo a través de una interna.
¿Mantiene la intención de competir por la Intendencia?
-Férreamente, hoy más que nunca. Estoy dispuesta a dar el debate, el PRO tiene una estructura preparada para eso, sabemos que la herramienta es Cambiemos, somos conscientes que la fórmula debe construirse con alguno de los compañeros que conforman la coalición y estamos dispuestos a converger. Yo ya expresé mi voluntad y no voy a claudicar en ese sentido, si es necesario a través de una interna.
¿Cuáles son las cosas más urgentes y necesarias que identifica en la capital?
-Hay dos cosas que no tienen que ver con las grandes obras y los proyectos magnánimos. Córdoba necesita orden y control, por un lado, y un sistema de acceso e información pública más eficiente. Hay que evitar la burocracia para poder recibir respuestas en tiempo y forma y hay que darle a la ciudadanía la posibilidad de convertirse en contralor de lo que nosotros hacemos.
Somos servidores públicos y a los únicos a los que debemos rendirle cuentas es a los ciudadanos. Por otro lado, tenemos que recuperar los espacios públicos comunes que están postergados y que son los lugares en los que la gente tiene que converger para evitar muchos de los problemas sociales que hoy se expresan de modo muy latente, muchos de los cuales se suceden por la falta de una política pública humanizada.
-¿Cómo sería una política pública humanizada?
-Hay que establecer prioridades. Si mi prioridad como Intendenta es un puente pero no tengo en cuenta que solamente el 19% de los chicos cordobeses termina el secundario, hay algo que como gobierno no estoy haciendo. Hoy es casi una necesidad atender esas urgencias que se manifiestan en una ciudad en la que hay un número cada vez más alto de chicos adictos.
El gobierno no les puede dar la espalda porque es su obligación contenerlos. Estamos en un lugar en el que se ven muchos esfuerzos individuales por parte de las iglesias, las organizaciones no gubernamentales o los clubes tratando de ayudar a los chicos adictos a salir de esa problemática pero no hay un índice vector que ponga a trabajar a todos los sectores en el mismo sentido. Detrás de cada chico que cae en una adicción hay una familia, una política de salud y una política de seguridad primaria. Está lo humano pero debemos hacernos cargo de canalizar los recursos del Estado para resolver esas problemáticas.
¿Crees que eso tiene que ver con un modelo de gestión o con “otras urgencias” que el municipio decidió atender y corrió la atención sobre esos temas?
-Tiene que ver con las dos cosas pero, además, con un cambio social que se dio en los últimos diez años de un modo muy rápido. Tiempo atrás era impensado que alguien pudiese conseguir estupefacientes con la facilidad que hoy lo hace a tan sólo diez minutos del centro, como también era una locura imaginar que íbamos a tener chicos de diez años consumiendo drogas.
Hace 15 años era impensado que la violencia intrafamiliar se denunciara como se lo hace en la actualidad, no tenemos cifras oficiales de femicidios pero sabemos que existen con muchísima más claridad que antes.
El municipio debe hacerse cargo de eso porque tiene en sus manos la política preventiva y la atención primaria. No podemos seguir pensando la ciudad solamente en transporte, basura, puentes y cordón cuneta, que por supuesto hacen falta, pero no alcanza.
¿Usted sabía que hay siete esquinas de la ciudad en las que se producen el 80% de los accidentes de tránsito? Hay que poner todo sobre la mesa y trabajar en políticas de prevención que hagan converger a todos estos temas y que repercutirán en un mejor índice de calidad social.
Hacia ese lugar hay que apuntar. Las políticas públicas más humanistas direccionadas a la prevención van a erradicar muchos de los problemas que tenemos y eso va a incidir directamente en una reducción del gasto público.
Es probable que el 2018 se recuerde como el tiempo en el que el debate en torno a la igualdad y al rol de las mujeres en los diferentes segmentos de la sociedad tomó una fuerza que pocos imaginaban posible hasta hace apenas un par de años. Soher El Sukaría entiende que mucho de eso, al menos en la Argentina, tiene que ver con “la convicción que al respecto tuvo Mauricio Macri, que siempre estuvo acompañado por una mujer. En el PRO yo nunca tuve una traba, un por qué o un para qué, siempre los espacios se ocuparon con la capacidad y el trabajo de las personas sin importar el género. Eso es muy importante porque así como tenemos la misma capacidad de discutir y confrontar ideas, debemos tener la misma posibilidad de ocupar los espacios de poder” asegura.
“Córdoba fue la primera provincia en tener una ley de igualdad, que conocemos como la “Ley Riutort”, sin embargo esa paridad nunca se vio hacia adentro de las estructuras de los partidos tradicionales. Recién este año la provincia incluyó un programa pensado para empoderar mujeres, “Pioneras”, en la estructura de gobierno.
Pero eso no se traduce ni en las listas ni en el gabinete. En la legislatura no se ven muchas mujeres y en el interior tampoco. De hecho, las mujeres que han logrado destacarse en la política cordobesa son las esposas de los gobernadores: Olga en su momento y Alejandra Vigo después” advierte y, en ese sentido, pone en valor a su fuerza política de dónde surgen las únicas dos mujeres que hacia adentro de Cambiemos hoy piden pista para encabezar listas: ella en la ciudad y Laura Rodríguez Machado en la provincia.
Desde la oposición suelen señalar que Macri toma la agenda de género por “conveniencia”.
-Para todo en este país hay dos visiones distintas pero en la práctica se ve cuál es la verdadera política. Mauricio puso sobre la mesa la agenda de género como casi ningún Presidente en la Argentina porque impulsó espacios como el Instituto Nacional de la Mujer, que existía pero no tenía presupuesto, y fue él en primera persona quien dio las indicaciones a los legisladores para llevar todo esto al debate parlamentario. Podemos criticarle muchas cosas, pero hay que ver los resultados y la agenda en torno a la igualdad no existió durante ningún gobierno de la historia como existe en este momento.
¿Imagina un diciembre con Cambiemos gobernando el país, la provincia y la ciudad?
-Es absolutamente posible. En el 2015 perdimos la provincia por menos de 4 puntos. Yo estoy convencida que Mauricio va a ser reelecto y que Cambiemos va a quedarse en el gobierno de la ciudad con un gobierno que tendrá una perspectiva diferente a la que tiene la actual gestión ya que el Intendente no podrá ser reelegido. Además, creo que tenemos grandes chances de ganar la provincia y eso lo marcó el gobierno actual al adelantar la fecha de las elecciones. Eso manifiesta una debilidad que quieren disfrazar como una fortaleza.
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