Alepo

El atentado se produjo cerca de un tribunal en la ciudad de Azaz, al norte de Alepo, la mayor ciudad siria. Hay decenas de heridos y todavía se trabaja para recuperar los cuerpos.

Lo anunció luego de que el último grupo de rebeldes abandonara la ciudad norteña tras casi cinco años de enfrentamientos, en una de las mayores victorias para el gobierno de al Assad.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, una organización pro opositora con sede en Londres, informó que la evacuación se detuvo en coincidencia con el sonido de varias explosiones en la zona.

Según la televisión oficial siria, se espera que unos 4.000 combatientes con sus familias y 9.000 civiles abandonen el este de Alepo.

Finalmente, este martes el Ejército sirio recuperó el control de la ciudad, que había sido tomada por los terroristas desde julio de 2012. Los civiles son evacuados, mientras que la oposición armada acordaron abandonar el lugar.

El embajador de Rusia ante la ONU, Vitaly Churkin, anunció desde Nueva York que los últimos rebeldes armados sirios que quedaban en la zona ya comenzaron a abandonar la ciudad en "los corredores designados".

La terrible estadística surge de un informe realizado por la organización no gubernamental (ONG) en Siria y difundido en su página de internet. Más del 50% de los muertos son niños y niñas que fallecieron debido a la escasez de medicamentos y equipamiento médico básico.

Estos bombardeos se producen un día después de que el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, anunciara que una delegación de su país y otra de Rusia se reunirán en Ginebra este sábado para tratar de evitar "la destrucción absoluta" de la ciudad de Alepo. Hay cuatro niños entre las personas fallecidas.

Unos 10.000 civiles abandonaron los barrios del este de la ciudad siria, donde las fuerzas gubernamentales recuperaron el control, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.