Bárbara es una niña de 10 años que vive en la ciudad cordobesa de Villa María y que se quedó sin ir al colegio, porque la obra social no le autorizó el tratamiento ni el acompañamiento terapéutico que necesita.

La niña es la única persona en el país que padece hipomielinizacion encefálica de grado 6, una extraña enfermedad que requiere tratamiento de rehabilitación y acompañamiento terapeútico.

Según publicó este viernes Villa María Vivo, la lucha de la familia de Bárbara con la mutual Unión Personal comenzó hace cuatro años, cuando la niña inició primer grado. En ese entonces, la obra social no quería cubrir el acompañamiento, por lo que los padres presentaron denuncias en la Defensoría del Pueblo de la Nación y obtuvieron un fallo favorable.

Desde ese momento, Barbi contó con un acompañante terapéutico y el tratamiento de rehabilitación: kinesiólogo, fonaudiólogo, maestra integradora y psicomotrista. Y pudo asistir al colegio.

En diciembre del año pasado sus padres presentaron, como todos los meses, los papeles a la obra social para autorizar la cobertura 2018. Sin embargo, no recibieron respuesta alguna.

Con el comienzo de clases, Barbi se preparó como siempre y asistió al colegio. Pero al otro día recibieron la peor noticia: la mutual les comunicó que no se aprobaba la cobertura para el acompañamiento terapéutico.

Entre las explicaciones, Unión Personal argumentó que únicamente se la podrían otorgar cuando su cuadro de base sea muchísimo más avanzado, es decir antes de ir a una internación.

De esta manera, la niña con discapacidad se quedó sin acompañante ni rehabilitación, a pesar de que todos los meses le descuentan la cuota de obra social a su padre.

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