Córdoba tendrá nueve estaciones fijas para el monitoreo de la calidad del aire
La Municipalidad adquirió los aparatos a una empresa local en el marco del Programa “Respira Córdoba”, con el apoyo de la Unión Europea.
En línea con las múltiples políticas de protección ambiental y la promoción de una ciudad saludable, la Municipalidad de Córdoba, a través del proyecto Respira Córdoba, adquirió nueve estaciones propias de medición de calidad de aire de manera continua. Estas serán instaladas en puntos fijos del área central y otros de la ciudad, entrando en funcionamiento luego de su configuración.
“Respira Córdoba” es una iniciativa presentada por el intendente Martín Llaryora y que cuenta con el apoyo de la Unión Europea (UE), la Alcaldía de Córdoba (España). La misma es llevada adelante por la Secretaría de Planeamiento, Modernización y Relaciones Internacionales junto a su par municipal de Gestión Ambiental y Sostenibilidad.
Con una inversión de $4.695.768, las nuevas estaciones son equipamientos de vanguardia que capturan una amplia gama de datos como temperatura, humedad y niveles de material particulado PM10, 4.0, 2.5 y 1.0
Estos componentes en suspensión se clasifican de mayor a menor tamaño y afectan en distinta medida la salud de las personas. El PM10 es mayormente polvo, polen y moho, que causan con frecuencia reacciones alérgicas, bronquitis y brotes de asma. El PM2.5 y PM0.1, son mucho más pequeñas y representan un riesgo mayor para la salud de las vías respiratorias.
Jorge Folloni, secretario de Gestión Ambiental y Sostenibilidad, precisó: “Nos va a permitir mapear y medir los niveles de la calidad del aire en protección de la salud de nuestros vecinos y vecinas, además se trata de un desarrollo de técnicos cordobeses”.
“Esta información será crucial para identificar fuentes de contaminación, diseñar políticas de salud pública y ampliar la visibilidad atmosférica”, agregó el funcionario.
Sostenibilidad ambiental
Los aparatos fueron fabricados por la empresa local Onsen, que agrupa a profesionales de la Universidad Nacional de Córdoba y de la Universidad Tecnológica Nacional.
“Funciona con una tecnología llamada ‘Internet de las Cosas’, en el cual sube los datos a través de telemetría, con un chip de servicio de telefonía. Y eso en la nube se puede procesar y luego visualizar en un sistema web para poder interpretar u hacer gestión de la calidad de aire”, indicó Gerardo Misael García, fundador de Onsen, fabricante de los dispositivos, empresa que agrupa profesionales de la UNC y la UTN.
Por su parte, Alejandra Torres, secretaria de Planeamiento, Modernización y Relaciones Internacionales, expresó su satisfacción con este logro: “El Proyecto Respira Córdoba es una muestra clara del compromiso de la Municipalidad de Córdoba con la sostenibilidad ambiental”.
La funcionaria valoró a su vez el impacto del programa junto al trabajo de la Universidad Nacional de Córdoba, que fortalecerá las capacidades técnicas y aportará tecnología de vanguardia al Observatorio Ambiental Municipal, que se encuentra en obras para su recuperación edilicia.
Esta tecnología reemplazará a las cuatro estaciones que estaban en funcionamiento y que, por las características propias de sus componentes, ya agotaron su tiempo de vida útil.
Una vez colocadas y puestas en funcionamiento, las nuevas estaciones permitirán calcular el índice de calidad de aire y advertir a los grupos de riesgo, momentos en los cuales no estaría recomendado hacer actividades al aire libre o el uso de barbijo, transformándose en una forma preventiva de salud pública.
Del evento participaron, además, Guillermo Díaz Cornejo, director general del Instituto de Protección Ambiental y Animal, y Laura Rovetto, directora de Evaluación de Impacto Ambiental y Cambio Climático.
Sobre el proyecto “Respira Córdoba”
El proyecto “Respira Córdoba” tiene como objetivo transformar el Área Central de la Ciudad de Córdoba en un lugar más sostenible y saludable. La Municipalidad busca mejorar la calidad de vida de sus habitantes y contribuir al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, particularmente en lo que respecta a ciudades y comunidades sostenibles, además de la lucha contra el Cambio Climático.
El programa recibió en 2021 una fuerte inversión para llevar adelante una serie de políticas destinadas a mejorar el Centro y “ecologizar la ciudad”.
Los primeros trabajos en el marco de esta iniciativa fue mejorar el Cabildo, la Manzana Jesuítica y el Obispo Mercadillo, como parte de un eje que apunta a recuperar el patrimonio histórico. Además de encarar políticas sustentables.
Con el ente municipal COyS se pusieron en marcha circuitos de reciclado de materiales que se generan en el sector con el objetivo la recuperación de más 300 toneladas mensuales de cartón y papel.
Entre las obras previstas estaba la mencionada adquisición de este nuevo instrumental para volver a medir la calidad del aire en esa zona, además de la calidad del agua. Y está en carpeta volver a equipar el Observatorio Ambiental del municipio, creado en la intendencia de Rubén Martí.
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