Al cumplirse un mes de la audiencia pública del 7 de agosto, vecinos de barrio San Antonio e Inaudi concentrarán este jueves desde las 10 horas frente Tribunales Federales para pedirle celeridad en su respuesta al juez federal Miguel Hugo Vaca Narvaja respecto al amparo ambiental presentado contra la empresa cordobesa, Porta Hermanos, y "la inacción del Ministerio de Energía y Minería de la Nación".

En diálogo con La Nueva Mañana, Silvia Cruz, referente de VUDAS (Vecinos Unidos en Defensa de un Ambiente Seguro), señaló que la concentración responde a "la preocupante emergencia sanitaria y ambiental que causa la planta de bioetanol en los barrios que limitan con ella, y a la necesidad de una respuesta urgente tras cinco años de esperar justicia. "Se nos acaba el tiempo y nos seguimos enfermando", apuntó Cruz.

"El juez pidió informes a la Secretaría de Ambiente de la Nación, a la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático de la Provincia de Córdoba, así como también a la Municipalidad de Córdoba, y les dio 30 días para presentarlos. Ahora, en base a ello, él tiene que decidir, es en base a ese tiempo de espera que nos hacemos presentes para que ellos sepan que nuestro tiempo es distinto, porque nos estamos muriendo. Nuestro objetivo es que aceleren este proceso y que la opinión pública se entere", dijo Cruz a La Nueva Mañana.

El caso

Durante octubre de 2016, la Red Universitaria de Ambiente y Salud de la Universidad Nacional de Córdoba y los vecinos de barrio San Antonio llevaron a cabo un relevamiento que reveló datos escalofriantes sobre las enfermedades que la planta de bioetanol instalada por Porta Hnos. en el año 2012, está provocando en la población de la zona.

 “Actualmente 2 de cada 7 niños menores de 12 meses y 4 de cada 25 niños menores de 5 años presentan malformaciones graves, siendo la tasa de malformaciones varias veces superior a la observada en la ciudad de Córdoba”, dijo en ese momento a este diario el médico Medardo Ávila Vázquez, acerca del estudio llevado a cabo en 134 hogares y sobre una población de 416 personas.

En ese contexto, el médico de Reduas, reveló a La Nueva Mañana que en lo que va de 2017, nacieron dos bebés con malformaciones en barrio Inaudi, a 300 metros de la planta de Porta, de los cuales uno murió.

“Este año, coincidiendo con los resultados a los que llegamos de que en barrio San Antonio hay un 28% de bebés con malformaciones congénitas, en Inaudi nacieron dos bebés nuevos, de los cuales uno lamentablemente falleció antes de cumplir el mes de vida a causa de una hidrocefalia. El otro tiene las manos malformadas”, explicó Ávila Vázquez.

Olivia

En octubre de 2016 murió Olivia, una bebé de tres meses quien había nacido con una enfermedad congénita que le impidió desarrollarse con normalidad desde la gestación. Ella y su familia vivían a media cuadra de la planta de bioetanol. Sus padres, a través del abogado Darío Ávila, denunciaron a Porta Hermanos de infringir el artículo 55 de la Ley de Residuos Peligrosos, que se refiere a que “ante un hecho de contaminación ambiental cuando se produce la muerte de una persona el delito se agrava y contempla penas de entre 10 a 25 años” y al intendente Ramón Mestre por autorizar la radicación de la planta.

En relación a la muerte de Olivia, Ávila Vázquez, destacó a ECOS que “teniendo en cuenta que la mamá de Olivia es joven, sana, no tiene antecedentes de aborto, ni trastornos reproductivos, su otro hijo es absolutamente sano, el padre es también sano y no toman medicamentos, la única fuente de contaminación que encontramos es la fábrica que está a 50 metros”.

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