Desde las 18, asambleas y organizaciones de los valles de Punilla y Paravachasca llevarán adelante una vigilia en la esquina de Caseros y Bolívar, que contará con un festival, proyecciones, muestras artísticas y la entrega de una carta abierta al Tribunal Superior de Justicia (TSJ). El cierre está previsto para el viernes a las 10.30, con una conferencia de prensa.

Demandan que el Poder Judicial provincial “resuelva urgentemente los recursos de amparo presentados”, y que se dicte la medida cautelar precautoria sobre la autovía de Punilla y la acción de Amparo Colectivo Ambiental presentada por vecinos y vecinas de Paravachasca.

Demandas sin respuesta

En declaraciones a La Nueva Mañana, Diego Aranda, integrante de la Asamblea Paravachasca, explicó que “la actividad surge porque en ambos valles el estado de situación de los proyectos de autovías viene siendo muy similares, tanto el de la ruta 38 en Punilla como el de la 5 en Paravachasca”.

Recordó que los proyectos de expropiación para ampliación de ambas trazas ingresaron juntos a la Legislatura Provincial en diciembre de 2020; y precisó que la asamblea de Punilla presentó medida cautelar y amparo en el TSJ y la de Paravachasca un amparo colectivo en tribunales ordinarios; ambos todavía sin respuesta.

Advirtió Aranda que mientras tanto la empresa Caminos de las Sierras está visitando los lugares por donde pasarían las autovías y avanzando con las expropiaciones, cuando no deberían hacerlo.

“En Paravachasca ya se lanzó la licitación, que hoy finaliza”, remarcó. “Por eso salimos este jueves y viernes para exigir que se dé respuesta y se cumpla con los amparos colectivos y las medidas cautelares y no se avance con los proyectos de autovías hasta que se expida la Justicia”, completó.

Cuestionamientos socioambientales

Las asambleas coinciden en que “estas megaobras atentan contra las fuentes de agua actuales y futuras” y denuncian que detrás del interés del Gobierno provincial, se encuentra “el interés de las corporaciones que ya vienen saqueando largamente nuestro país”, indicando que las autovías “forman parte de un corredor bioceánico planteado en la Iniciativa para la Infraestructura Regional Sudamericana (IIRSA)".

Adelantan que el impacto que podrían acarrear estas autovías “es altísimo e irreversible” y subrayan que en las audiencias públicas virtuales desarrolladas para ambas autovías, “el 90 por ciento de quienes participamos allí rechazamos estos proyectos”.

Finalmente, fundamentan que los proyectos de autovías “no cuentan con un Estudio de Impacto Ambiental Acumulativo”, condición respaldada por la Corte Suprema de Justicia; que “no cuentan con el verdadero proceso de información y participación ciudadana previo que debe existir ante cualquier proyecto de esta magnitud”; que no se consultó a las comunidades originarias; y que “afecta a zonas de alto valor de conservación de monte nativo” y frecuentemente incendiadas. 

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