Belgrano sacó lo mejor de su chapa y se trajo de Mendoza tres puntos vitales en su aspiración para meterse en el reducido, luego de un contundente e inobjetable triunfo 3 a 0 ante Gimnasia y Esgrima, por la 29° fecha de la Primera Nacional. Una verdadera prueba de carácter del equipo que dirige Guillermo Farré que con un fútbol de alto vuelo vuelve  a prenderse en la lucha por la clasificación al reducido.

Un festejo con valor agregado ya que Gimnasia era un competidor directo por esos espacios en pugna, para seguir soñando con el reducido. Y luego de un primer tiempo parejo, una de las figuras del equipo y del partido, el juvenil Bruno Zapelli, puso la apertura del marcador a los 36 minutos del primer tiempo. Encaró en el área, hizo una pausa y un giro combinó con Adrián Balboa y definió de primera al primer palo, batiendo al arquero, ante la mirada atónita de la defensa, sin reacción.

De todas maneras, quedaba el complemento y en el ambiente resonaba la intriga si Belgrano iba a tener la personalidad para sostenerlo o iba a sufrir algún sobresalto como pasó la fecha pasada ante Deportivo Riestra. Así y todo, fue oportuno para tomar el control psicológico del partido y saber usarlo a favor. Como ocurrió a los 18 del segundo tiempo, cuando Pablo Vegetti impidió una salida del local, robó la pelota y cedió para Balboa, quien fue derribado en el área. Y si algo muestra Belgrano en esta faceta es la falta de egoísmo: Vegetti, habitual pateador de penales, le dejó el remate desde los 12 pasos al uruguayo y llegó el aumento del marcador.

Ya con el local jugado con todo, con el ingreso de Gelabert y Ramón Lentini, el dueño de casa dejó espacios y el "Pirata" pudo aprovechar. A los 36 minutos una contra letal dejó a Balboa otra vez a cargo de la definición de la jugada pero eligió habilitar al medio para que el ingresado Juan Cruz Ruiz Gómez definiera ante Tomás Giménez y liquidara el pleito.

Un 3 a 0 sin discusión, un Belgrano que recupera la confianza y un Farré que cada vez es más líder del equipo. El Celeste quedó en la quinta ubicación persiguiendo por dos puntos a San Martín de Tucumán y no da tregua en la ilusión del objetivo, soñando con el ascenso, y este triunfo en Mendoza es un argumento más de la recuperación general y de la solidez general y el estilo de juego, dando a entender que dará pelea hasta el final, bien del modo de los de Alberdi, sin ahorrar esfuerzos ni sacrificios mientras la matemática le siga dando vida.