Ed Impresa Por: Federico Jelic 06/08/2021

Auzqui: “Siento que nací jugando en Talleres, no es joda”

El delantero Carlos Auzqui disfruta la regularidad que logró en barrio Jardín, además de tener en claro sus objetivos ambiciosos. En Córdoba encontró la comodidad que necesitaba.

El delantero Carlos Auzqui disfruta la regularidad que logró en barrio Jardín. - Foto: Prensa Talleres-

 

Sentido de pertenencia e identidad, dos valores genuinos que no son fáciles de encontrar en ningún club o equipo. Independientemente del origen o de la posibilidad de tener minutos en cancha, el fútbol te puede llevar a distintas latitudes impensadas y escenarios complejos. Por eso la comodidad y sentirse en familia de manera natural son atributos que muchos jugadores persiguen como objetivo, muchas veces sin éxito. Esta introducción viene como anillo al dedo para describir las sensaciones que siente el futbolista de Talleres Carlos Auzqui.

¿Volante o delantero? ¿O las dos cosas? Dentro de la flexibilidad y los roles mixtos que propone el DT Alexander Medina, el “Perro” fue quien mejor interpretó la idea y rápidamente se ganó un lugar, a base de juego, sacrificio y también de goles. En diálogo con La Nueva Mañana, el ex jugador de River, Lanús y Estudiantes comentó su semblante general desde su llegada al Albiazul y los objetivos por delante. Sin dejar de soñar con un título, pero conforme con su posición en cancha y su continuidad, algo que se le venía negando en otros equipos. 

- ¿Qué le está faltando a Talleres? 

- El equipo está a la altura, sigue generando situaciones de gol, seguimos yendo para adelante, no bajamos el rendimiento en general, pero necesitamos más eficacia. Eso seguro es un aspecto a corregir. Nos está costando terminar las jugadas, a veces nos apresuramos, es tiempo de concretarlas porque si no lo bueno que realizamos se desvanece. 

- ¿Imaginaban este arranque irregular o piensas que es parte del proceso? 

- Realizamos una buena pretemporada, terminamos la campaña pasada en un buen nivel, y la verdad es que esperamos estar más arriba. Queríamos ser protagonistas, esto recién empieza. Pero lo mismo nos está faltando para llegar al ideal. Todavía estamos buscando el mejor funcionamiento, vamos a seguir poniendo esfuerzo para crecer y dar el salto. 

- ¿A qué se debe?

- Ya vamos a agarrar confianza. Ese ingrediente es fundamental. Fíjate que Talleres sigue saliendo jugando por abajo, no es de rifar la pelota, tiene intensidad y genera chances de gol, toma la posta del partido, pero claro, al no ganar o al no meter las chances que creamos, queda todo en el olvido. De parte nuestra seguiremos con esa receta, esto recién comienza, los resultados de esta forma ya van a aparecer. 

- De repente estás llegando al área con más peligro de gol… 

- Sí, es parte de un trabajo táctico. Le digo a Valoyes o a Ángelo (Martino) que siempre voy a llegar desde el punto del penal, que la tiren a esa zona que yo estoy. Es ley. A veces sale bien, a veces me la tapa el arquero. Pero la intención de mi parte está siempre. 

- ¿Cómo te vas acostumbrando a esa nueva función mixta? 

- No era una función familiar para mí, pero me estoy acostumbrando y lo mejor de todo, me está gustando. Está claro que al principio me costó, cuando vine al principio no estaba del todo cómodo. Pero luego encontré respaldo del DT y pude sacar lo mejor de mí. De repente me encuentro que puedo llegar más al gol y eso me tiene contento. Estoy llegando al gol como nunca. 

- ¿En qué quedó el interés para ir a jugar a Medio Oriente? 

- La oferta fue concreta, llegó a River y solicitaron mi incorporación, pero yo la verdad no quería dejar a Talleres fuera de este compromiso. Si Talleres no iba a ganar nada, mejor me quedo. No iba a hacer algo que no le sea beneficioso al club. Es verdad que es motivante desde lo económico sobre todo porque se cobra en dólares y por la situación de nuestro país, eso sirve para sacar alguna diferencia. Pero elegí quedarme porque confío en este proyecto en Talleres. Me seduce, es cierto, pero no me saca del foco. Veremos a fin de año cuando termine mi contrato si renuevo en esta nueva casa para mí que es Talleres o se reflota la chance de ser transferido. Estoy cómodo en Córdoba. 

- Esa decisión marca un compromiso con Talleres… 

- Es que, si no le sirve a Talleres, no me voy. Por eso tampoco hice fuerza para salir. Acá encontró el nivel que tanto vengo buscando, después de deambular por varios clubes. Encontré regularidad, continuidad y estoy feliz de este gran momento. Nos animamos a pelear cosas importantes, creo que vamos armando el camino paso a paso para conseguir cosas grandes.  

- Y esa identificación se logra con resultados… 

- Y sí, el hincha te hace parte y nos gusta. Desde que llegué a Talleres me hicieron sentir parte; y eso no se consigue tan fácil en otros lados. Te juro que siento que nací acá en Talleres, que soy de las inferiores, no es joda. Mirá que tuve varias camisetas. El cariño de la gente es espectacular, no me quiero imaginar lo que sería ser local en el Mario Kempes con hinchas en las tribunas. No es verso. Por eso no iba a presionar para irme a ninguna parte, acá tenemos todos por hacer y de pronto me siento protagonista. 

- Igual, la vara de la exigencia quedó alta y no están exentos de las críticas…

- No, para nada, pero no lo veo como una presión. Igual queremos remontar este momento, lo vamos a conseguir, no tengo dudas. De pronto nos acostumbramos a ganar, jugamos copas internacionales, peleamos contra los mejores y ahora queremos apuntar a buscar el campeonato. Quedó demostrado que podemos y a eso nos vamos a dedicar. Sin complejos. 

- La experiencia internacional dejó en claro que el plantel fue corto… 

- Sí, pero nos exigimos al máximo y casi logramos el objetivo. Yo ahora noto que los rivales nos respetan más. Fue una linda experiencia, pero nos fuimos quedando sin elementos hasta el final. Fue una triple competencia si contamos la Copa Argentina, hubo muchos viajes, horas de vuelos retrasados, estuvimos varados, no siempre pudimos dormir bien o comer correctamente, mucho tiempo en aeropuertos… No es excusa, pero incidió. 

- ¿Te sentís referente? 

- Y no sé... Tengo un camino, pero siempre hablamos entre todos. En el plantel hubo varios jóvenes que debutaron e hicieron sus primeras armas en un torneo internacional como la Sudamericana, marcando que no tenemos un plantel largo para esta exigente competencia. Y eso es complicado. Ojalá venga más gente a dotar de talento y ganas de crecer a este plantel que lo necesita si quiere dar el salto. 

- ¿Incide la ausencia de refuerzos? 

- Fíjate que se fueron titulares como Pochettino, Fragapane y no fue fácil reemplazarlos, nos arreglamos con lo que tuvimos y creo que todos hicieron un buen papel. No renunciamos a nada lo mismo, entiendo que muchos quieran dar el paso de jugar en el exterior por la situación de nuestro país, pero nosotros tenemos que buscar la forma de que eso no nos debilite tanto. Mantuvimos la base y con eso tenemos para dar pelea. 

- ¿Cómo pasas el tiempo en tus ratos libres? 

- Después de los partidos me quedo repasando las jugadas. Soy un poco obsesivo. Me fijo en errores, a veces en cancha uno no se da cuenta, hace una de más o se apura y con las imágenes con la mente en frío, uno aprende a meter un freno. Es para corregir detalles. Me doy maña con eso. Me enojo solo, me cuestiono si me apresuro o acelero y pienso cómo tendría que haber resuelto.  Te juro que después de cada partido me cuesta dormir, es la adrenalina. Y de esa forma espero el partido que viene para tener revancha. 

- ¿Quiénes te acompañan en Córdoba? 

- Mi mujer y mi hija, Cintia y Lupe, que me critican porque no pude hacer un gol contra Boca. Es mi barra brava (risas). Este fin de semana llegaron unos amigos de La Plata; entonces metimos asado para disfrutar el momento y el tiempo sin vernos. 

- ¿Te gusta Córdoba? 

- Sí, cada vez me estoy acostumbrando más. Me gusta salir a pasear a las sierras. Acá en Córdoba en 45 minutos, una hora como mucho, ya encuentra campo y paisajes hermosos, algo que en Buenos Aires es difícil de igualar. Está todo cerca. Me gusta mucho pasear en familia. 

- ¿Y en tu casa? ¿Qué hacés? 

- Me gusta ver series, sobre todas las cosas. Me copé con “Breaking Bad” y “Prision Brake”. 

- ¿Cuál nos recomiendas? 

- “Lupin”. Es genial. La terminé de ver hace unos días. Es corta y entretenida. No te la pierdas.

 

 


Seguí el desarrollo de esta noticia y otras más 
en la edición impresa de La Nueva Mañana
 
Todos los viernes en tu kiosco ]