Latinoamérica vive días agitados. Luego de las protestas contra las políticas sociales y económicas del presidente de Colombia Iván Duque, el jefe de Estado declaró toque de queda en Bogotá y ordenó que las fuerzas de seguridad ocupen las calles ante los "desórdenes". 

La medida fue anunciada el viernes a la noche a través de su cuenta de Twitter, donde Duque expresó: "Di instrucciones al Ministro de Justicia para coordinar que se tomen las medidas para judicializar a los violentos y que no haya impunidad". 

"Una cosa es que Colombia marche por un mejor país y otra cosa es que politiqueros quieran utilizar estas extrepsiones para su beneficio personal", sentenció el mandatario.

Hasta el momento se contabilizan al menos tres muertos y casi 300 heridos luego de dos jornadas donde se registraron saqueos y disturbios pero también movilizaciones pacíficas. 

Con el toque de queda, el mandatario dispuso en las calles de Bogotá a patrullas mixtas de la policía y el Ejército, que tendrán el objetivo de "mantener el orden público".