Ed Impresa Ignacio Tamagno 19/10/2019

La vida simple: "Chicas"

“La vida simple” es una serie de pequeñas crónicas que intentan capturar la experiencia sensible de lo cotidiano. A partir de breves encuentros con taxistas, cirujas, naranjitas, presos, porteros e inmigrantes, cada crónica busca plegar la experiencia de realidad de todos los días para sacar de ella un fotograma de vitalidad y un sintagma de sabiduría popular.

Iustración: Agostina Barborini

Me acerco a casa y en la puerta del edificio veo a dos personas: Abel, el encargado, y un chico que no sé quién es. Después de saludar, desensillo de la bicicleta y me pongo a charlar. Charlar es algo que me gusta. Charlamos de comida: que esto, que aquello, todas comidas norteñas que yo no tengo idea. «¿De dónde te conozco?», le digo al chico que está junto a Abel, aprovechando una pausa. «De la verdulería», me contesta el chico. Boliviano -pienso yo-, aunque sin cara de coya. Convido lo que traigo, unos ravioles crudos, que comemos de la caja, él y yo: Abel se nos ríe. Los bolivianos tienen un acento dulcísimo, para mí es como una lluvia de azúcar con restos de alcohol puro. Los peruanos, mi familia por ejemplo, son dulces enteros. Los bolivianos, en cambio, son medio borrachitos al hablar. Eso me gusta. El verdulero es más chico que yo y hace más tiempo que vive en Buenos Aires. Vino de contrabando pero consiguió papeles. Trabaja de siete de la mañana a nueve de la noche y a veces hace horas extras pero no se las pagan. Cobra mil setecientos pesos y duerme hacinado en una pocilga. Dejó de estudiar en su país porque le dijeron (le mintieron) que esto era una mina de oro. Su mamá le pidió que le dejara de mandar plata porque los pesos argentinos valen la mitad que los de Bolivia. Le ofrecieron de volver pero no quiere. Me sorprendo. Un tipo que la pasa tan mal pero quiere quedarse en un lugar tan agresivo como Buenos Aires, donde no tiene familia, donde lo discriminan día a día, donde lo negrean hora a hora. Entonces le pregunto: «¿por qué no te querés volver?» Saltando como un pajarito cocainómano se me acerca y me responde: «¡¿Es que tu has visto las chicas que hay aquí...?!»

Nacho Tamagno nació en Villa María en 1989. Actualmente reside en la ciudad de Córdoba.
Es actor y, de forma más secreta, escritor de cuentos y crónicas.

Agostina Barborini nació en la ciudad de Córdoba en 1989, donde produce actualmente.
Artista visual, actriz y escenógrafa. Instagram @agos.barborini


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