“Eso no existe", dijo Lázaro Báez en la noche del martes cuando accedió a un diálogo telefónico desde la cárcel y a través del celular de su abogada Elizabeth Gazaro con el periodista Tomás Méndez. El empresario detenido se hacía eco la existencia de unos supuestos audios en los que él señalaba que todo lo que tenía pertenecía a "una persona que está arriba". Las especulaciones en torno a esa "confesión" que forma parte de una escucha (cuya legalidad es puesta en duda o valorada, según quién analice a situación) estiraron el hilo hasta la familia Kirchner. La lectura que hicieron quienes dieron entidad a esos audios fue que Baéz aportaba por primera vez un elemento que lo pocisiónaban directamente como el testaferro del fallecido ex Presidente. 

Pero Báez lo negó. Dijo que no le sorprendía que se inventen estas cosas y aseguró: "eso sería una falta de respeto a mi amigo porque eso es no conocerlo".

La desmentida de Báez se cayó el domingo por la noche, cuando el programa Periodismo Para Todos, que conduce Jorge Lanata, difundió los audios cuya existencia había sido negada por Lázaro y su abogada. 

"Todo lo que tuve es de una sola persona que está arriba y me lo dio para que lo administre y no lo supe administrar quizás en la forma adecuada que él quiso que lo administrara", dice Báez en diálogo con una mujer. "Y cometí los errores que cometí y quizá por eso estoy donde estoy, para tener un acto de reflexión. Y veremos si él me da una oportunidad distinta para no cometer los mismos errores" afirma en los audios en los que también hacer referencia a algunas de las causas y nombra a ex funcionarios.