Con 79 y 81 años decidieron cumplir con la promesa que hace tiempo se habían hecho el uno al otro: viajar desde Temperley, Buenos Aires, a Córdoba y una vez allí, ir hasta Carlos Paz y subir el cerro de la Cruz.

Así es cómo nada detuvo a esta intrépida pareja que, a pesar de los macabros hechos que le dieron protagonismo durante los últimos años al lugar, decidió emprender la aventura y llegar a la cima.

Sin embargo, al llegar a la punta, notaron que las fuerzas que les quedaban no eran suficientes para descender.

"Llegaron arriba y quedaron exhaustos y cuando se disponían a bajar, la mujer se percató que estaba agotada y solicitó asistencia al personal policial", dijo uno de los Bomberos que ayudó al hombre y a la mujer a llegar a la base del cerro.

Y agregó que "a la señora solamente le temblaban mucho las piernas”. La pareja se encuentra en buen estado de salud.