Tras dejar inaugurado en Córdoba, el Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE), Mauricio Macri realizó una de sus habituales "visita sorpresa" a una familia cordobesa.

Tal como ocurrió en oportunidades anteriores, como con el dueño de un parripollo que luego debió cerrar, este miércoles el Presidente eligió a una familia de barrio Juniors, en la ciudad de Córdoba, para su timbreo.

En esta oportunidad visitó a Carolina Carrasco, quien contó cómo fue recibir a Macri en su casa. “Sabíamos que teníamos una llamada porque le dejé un mensaje en el Facebook por el G-20, pero abrí la puerta y él estaba ahí con facturas. Yo le escribí felicitándolo, diciéndole que era muy lindo que pasara eso en nuestra país. Era muy emocionante. No sabía que lo iba a ver físicamente”, contó la mujer a Mitre Córdoba.

Sin embargo, al concluir su visita -en plena campaña electoral y con un dólar batiendo récords- un grupo de vecinos se reunió en la puerta de la vivienda de la familia, algunos para saludarlo y otros para proferirle insultos.

Fue entre éstos últimos que una mujer, cuando el Presidente se subía al auto oficial, le gritó "Chau, ladrón", en referencia a las múltiples causas en las que se encuentra involucrado Macri a pesar del discurso "anticorrupción" que se instala desde el Gobierno nacional.

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