El futuro de Talleres, entre las promesas de Fassi, las SAD y las dudas del hincha

A medida que el hincha se ilusiona, crecen las dudas sobre el costo que estas promesas podrían tener sobre la identidad del club y el lugar del socio en la toma de decisiones.

Opinión27/01/2025 julio pereyra
andrés fassi web
ELECCIONES 2025 EN LA T."La idea es poder continuar, pero eso definitivamente lo tiene que decidir los socios, que son los que tienen la potestad de la decisión", dijo el presidente del club albiazul.

Las promesas de Andrés Fassi suenan tentadoras: un estadio innovador y una reforma estatutaria que le permitiría al club dar un salto al futuro. Sin embargo, a medida que el hincha se ilusiona, crecen las dudas sobre el costo que estas promesas podrían tener sobre la identidad del club y el lugar del socio en la toma de decisiones.

Posterior a la presentación de la nueva indumentaria del club y el anuncio de su asociación con Holcim, Andrés Fassi, presidente de Talleres de Córdoba, brindó la semana pasada una conferencia de prensa donde se refirió a varios aspectos clave que definirán el futuro del club albiazul, como la construcción del nuevo estadio, la posible intervención de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) y la reforma del estatuto de cara a las próximas elecciones.

Fassi no solo lidera el club cordobés, sino que también está a cargo de FC Juárez en México desde septiembre de 2024. Su visión empresarial y de negocios lo acercan al modelo de gestión de clubes promovido por figuras como el presidente Javier Milei y funcionarios como el Secretario de Turismo, Ambiente y Deporte de la Nación, Daniel Scioli, o la diputada de La Libertad Avanza, Juliana Santillán.

Elecciones en noviembre

En noviembre de 2025, el Club Atlético Talleres renovará su conducción a través del voto de los socios. Consultado sobre su posible reelección, Fassi fue claro al destacar el rol de los socios en la toma de decisiones: "La idea es poder continuar, pero eso definitivamente lo tiene que decidir los socios, que son los que tienen la potestad de la decisión".

Para seguir al mando de Talleres por tercera vez consecutiva, Fassi necesita que se modifique el estatuto del club. Desde la reforma de 2017, el mandato presidencial está limitado a dos períodos consecutivos. Fassi ya completó los ciclos 2017-2021 y este último culmina a finales de este año.

Fassi enfrenta dos grandes desafíos: la reforma del estatuto para permitir una posible reelección y su suspensión por dos años, sancionada en octubre de 2024 por el Tribunal de Disciplina de la AFA. Aunque esto podría impedir su participación en las elecciones, Talleres apeló al TAS, y el fallo aún en vigencia será clave para su futuro al frente del club.

Para que el calendario de cara a las próximas votaciones tome su curso, el Club deberá llamar a una asamblea extraordinaria “que está estipulada para marzo o abril”, donde se empezaran a esclarecer los detalles y el tumbo de la T.

La gestión de Fassi como presidente de la “T”

Andrés Fassi asumió la presidencia del Club Atlético Talleres en noviembre de 2014, con la promesa de llevar al club a un modelo "innovador y moderno". Bajo esa primera gestión, los matadores pasaron de jugar en lo que era el “Argentino A” a Primera División.

La gestión de Fassi como presidente de la “T” ha sido exitosa en algunos aspectos, sobre todo en lo que respecta a infraestructura, pero la falta de un título que consagre a Talleres como un equipo competitivo genera frustración entre los hinchas. La expansión de su mandato, tras la reforma de 2017, consolidó su reinado al frente del club, pero muchos se preguntan si este modelo de gestión se enfoca demasiado en los negocios y poco en el fútbol como pasión popular.

Con 11 años de gestión ininterrumpida, Fassi está por alcanzar un récord de permanencia que lo pone a la sombra de Amadeo Nuccetelli, quien estuvo 14 años en el cargo. Sin embargo, a diferencia de Nuccetelli, cuyo legado está marcado por títulos y glorias deportivas, la gestión de Fassi despierta opiniones divididas: mientras algunos destacan avances en infraestructura y visibilidad internacional, otros critican el rumbo cultural y social, y una estructura que parece más diseñada para perpetuar a una figura que para democratizar el club.

Surge una oposición

En este contexto, surgen nuevas agrupaciones de hinchas que empiezan a disputar el control del club. "Más Talleres", presidida por Graciela Martínez Ghirardi y su vice Daniel Quinteros, anunciaron su intención de participar en las elecciones. Sin embargo, Quinteros es consciente de que, al igual que Fassi, no puede postularse. No ha formado parte de ningún órgano de conducción del club, lo que lo limita según el estatuto, al igual que cualquier hincha externo.

Fassi afirma que las modificaciones estatutarias podrían realizarse con el aval del 70% de la asamblea directiva, lo cual está "totalmente reglamentado". Pero su planteo de incluir a los socios en la toma de decisiones queda en el aire: “Queremos que ellos también se manifiesten en los objetivos que Talleres tiene para los próximos 10 años”. Mientras tanto, socias y socios continúan sin un mecanismo claro que haga efectiva esta participación.

Un factor clave en los próximos comicios será la cantidad de socios habilitados para votar. En 2021, fueron 13.000, según informó el club. Con el aumento de socios, la agrupación "Más Talleres" solicitó el padrón electoral, pero la respuesta fue "Apenas se conforme la Junta Electoral se podrá tener el acceso al padrón actualizado de socios". Para ejercer el voto, los hinchas deben tener al menos dos años de afiliación al club.

A nuevo estadio, nuevas inversiones

Si bien no se han revelado detalles específicos sobre la construcción del segundo estadio del Club Atlético Talleres, su presidente compartió su visión sobre lo que le gustaría: un estadio cercano a la gente y con características innovadoras.

El presidente explicó: “Es un estadio muy cerca de la gente, donde tendrá más de 300 palcos y una sola popular, un espacio donde podamos albergar ese mensaje de un solo Talleres”. Sin embargo, el proyecto no está exento de interrogantes, especialmente sobre la posible intervención de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) en su concreción.

Las SAD son un modelo que ha generado polémica desde la década de 1990, cuando durante el gobierno de Carlos Menem se intentó transformar a las asociaciones civiles sin fines de lucro en sociedades comerciales. A pesar de los intentos frustrados en 2017 bajo Mauricio Macri, la llegada de Javier Milei al poder reavivó esta propuesta. Las SAD prometen profesionalizar la gestión, inversiones y sustentabilidad, ejemplos como el Liverpool entre 2007 y 2010 exponen sus riesgos. El temor principal es la pérdida de identidad y que el fútbol se convierta en un negocio controlado por pocos.

Consultado sobre si el club esperará la llegada de las SAD para financiar la obra, Fassi respondió con cautela, destacando que el nuevo estadio se construirá con recursos adicionales a los que se destinan al funcionamiento normal del club. Aseguró que la estructura financiera se basará en cuatro pilares fundamentales de ingresos: la venta de los palcos, los 2.200 terrenos disponibles, naming e inversiones externas, dejando en el aire si las SAD jugarán un rol central en este proceso.

"No poner en riesgo la sustentabilidad"

En relación con los riesgos financieros, Fassi fue tajante al afirmar que el proyecto no pondrá en riesgo la sustentabilidad institucional ni deportiva del club: “No se usarán flujos de la parte operativa ni institucional para lograr que Talleres no ponga en riesgo su sustentabilidad en ningún momento durante los años que el estadio se construye”.

Luego adelantó que hay cinco posibles ubicaciones para el nuevo estadio de Talleres, aunque algunos lugares pidieron mantener la confidencialidad. Entre las opciones mencionadas, destacó Mundo Talleres, al sur camino a Alta Gracia, otra camino a Circunvalación y ruta 9 y una alternativa hacia el oeste. "Tomaremos la mejor decisión en el mejor lugar", aseguró.

Por otro lado, Fassi comparó el costo de la construcción del estadio con ejemplos internacionales, mencionando que “históricamente en el mundo, el costo por butaca ronda los 2.000 dólares, lo que llevaría el costo total a entre 100 y 120 millones de dólares para un estadio de entre 50.000 y 60.000 personas”. Si bien esta cifra es un estimado general, se refirió a un rango común para proyectos de gran escala y aseguró que buscarán asegurar un costo diferencial gracias a sus aliados estratégicos.

“Tenemos más de 70 aliados, el líder mundial acompañándonos, 150.000 personas respaldando el proyecto (refiriéndose a la necesidad de multiplicar la masa societaria), 300 empresarios y empresas, y personas físicas comprando los palcos para que se haga realidad. Mucha gente está comprando terrenos para vivir donde será el mundo Talleres”, afirmó Fassi, resaltando el apoyo que buscan para la iniciativa.

Finalmente, Fassi dejó en claro que el nuevo estadio será una de las prioridades del club en la próxima década: “Con un enorme nivel de compromiso y responsabilidad, poder anunciarlo y decirlo es el gran objetivo para los próximos años. Definitivamente, este será el gran desafío de la próxima década”.

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