“Tenemos que llevar el candidato número uno en la lista”

En entrevista exclusiva con LA NUEVA MAÑANA, en el lanzamiento de su versión impresa, el intendente Ramón Mestre se aferró a la postura de que el radicalismo, y su espacio, puntualmente, debe ser el dueño del primer lugar de la lista para las elecciones legislativas de medio término. A horas de los rumores que surgieron en algunos medios nacionales, donde daban por sentado que el jefe de Gabinete, Marcos Peña, le había dejado claro al titular del Palacio 6 de Julio que el primer escalón era para el PRO, el jefe comunal capitalino negó esa versión y dijo que “los temas electorales se tocaron solo por arriba”.

Además, en un extenso mano a mano, Mestre dio su punto de vista sobre la injerencia del macrismo en la interna de los diferentes núcleos que tiene el radicalismo, el inmediato acuerdo con el Suoem y la charla con Rubén Daniele, y distintos aspectos de la gestión. Por ejemplo, la situación de la planta Bajo Grande y las críticas que surgieron en los últimos días.

A poco de cumplirse un año y medio de su segundo mandato, Mestre sostiene que hay frentes de conflicto que se cierran con más rapidez que antes y llega a la siguiente conclusión: “Cuando era senador o concejal veía las cosas muy distintas con respecto a lo que las veo ahora, con uno en el lugar del oficialismo”. “No justifico nada, pero hay que estar sentado acá y tomar decisiones; y lo que intentamos, con cada una de ellas, es resolver los problemas más rápido”.

“Estamos transitando el sexto año de gobierno con más de 200 frentes de obra en la ciudad, algunas que deberían haber arrancado antes y otras que estamos inaugurando como en barrio Arenales, con 15 cuadras de cordón cuneta, bocacalles de asfalto y hormigón, y atendiendo reclamos que llevaban 50 años, como es el caso del canal Constitución y la avenida 11 de Septiembre”.

La rapidez del acuerdo con el Suoem, ¿tuvo urgencia o mérito de los que encararon la negociación?
- Me parece que aquí ha primado un grado de madurez de los cuerpos gremiales y de los funcionarios municipales. Nosotros nunca hemos permitido que haya una pérdida del poder adquisitivo. Sabemos que son los mejores pagos como empleados públicos en la provincia pero no podemos permitir que se pierda el poder adquisitivo. Y en eso, llevamos adelante una negociación que esta vez, logramos un acuerdo que se incorporó en la ordenanza y se faculta al Poder Ejecutivo a tomar distintos índices de inflación: Córdoba, CABA, San Luis, Santa Fe y el Indec; se hace un mix y sobre la base de eso, va acompasado de acuerdo a como se vaya dando la negociación en el segundo semestre. Dándose, además, en un año que también trae aparejado fricciones por las elecciones que habrá en el gremio y con dirigentes o delegados que aprovechan a tomar posiciones para la tribuna en busca de conseguir más votos.
Hacía un tiempo que no hablábamos con el secretario general (Daniele) y la verdad que fue muy positivo por llegar a un acuerdo.

¿Cuál es el análisis de lo que sucede con la planta Bajo Grande y los índices de contaminación que surgieron en los últimos días?
- Los déficits en la infraestructura corresponden a décadas de falta de inversión. Estamos haciendo junto al Gobierno nacional y provincial las obras que hay que hacer. Muchas de ellas, que no se ven, pero son claves. En materia de cloacas, a nivel redes y aliviadores el presupuesto es millonario. La Provincia deberá hacer su parte también.
Bajo Grande es una planta que tiene muchos años, yo estuve hace poco visitándola porque estamos trabajando en el mantenimiento de los percoladores, que contienen lo último del barro y las bacterias, y después del paso se va decantando todo lo vinculado a la contaminación.
Esto es la demostración de un gobierno que está comprometido en obras que no se ven pero que hacen a las cuestiones ambientales. A esos piletones, el último que le había hecho mantenimiento fue mi padre cuando el gobierno de (Eduardo) Angeloz le hizo el traspaso del mantenimiento de la planta a la Municipalidad y 30 años después lo empezamos a llevar adelante nosotros. Contando además para eso con el respaldo de la Provincia.

¿Se trajo alguna respuesta de la reunión con Marcos Peña? Un medio nacional publicó que ya estaba todo resuelto, con el PRO encabezando.
- Con Peña analizamos muy por arriba la cuestión electoral, tuvimos una charla de trabajo y de gestión con el jefe de Gabinete. Reitero: tocamos muy por arriba (afirma con énfasis) la cuestión electoral aunque la teníamos prevista pero por agenda se suspendió, porque el jefe de Gabinete tenía la presentación en el Senado y por el viaje a Estados Unidos. Lo que hicimos fue tratar de bajar los decibeles y llegar con diálogo a un acuerdo en el armado de las listas.

¿Lo preocupa la injerencia del PRO en la interna radical?
- No me preocupa porque eso no puede ni debe ocurrir. Somos un partido autónomo, con más de 120 años y el radicalismo de Córdoba es un partido histórico. Y sé que mayoritariamente los integrantes de los distintos núcleos no van a permitir este tipo de intromisiones.
Las autoridades partidarias trabajarán en lo que hace al diálogo y el consenso para el armado de las listas. Somos la columna vertebral y tenemos que conducir llevando al candidato número uno. A la vez, hay que recordar que se renuevan cuatro bancas de lo que es el frente Cambiemos compuesto por el radicalismo, el PRO y el Frente Cívico: en el 2013, el PRO logró una sola banca que es la de (Héctor) Baldassi, y el radicalismo logró tres con (Diego) Mestre, Soledad Carrizo y Brenda Austin.

¿Qué expectativas tiene para los próximos años?
- Las mejores. Realmente siento el cambio en todos los órdenes. Los primeros cuatro años de gobierno, y los que me tocó como senador fueron en una Argentina muy compleja. Sin irnos lejos, porque hablo seguido con María Eugenia Vidal, y lo que está encontrando en la provincia de Buenos Aires, es inimaginable. Pero acá en Córdoba, las obras que no se hicieron, el retroceso que tenemos es desmesurado, inmoral para con los cordobeses… Estamos ahora reivindicando el federalismo, las autonomías, y fortaleciendo a los Estados, se vienen muy buenos tiempos para Córdoba, una gran oportunidad.

¿Qué rescata en esta etapa de su gestión?
- Una de las cosas es la ordenanza de lotes. Estoy enviando tal como me comprometí, un proyecto de ordenanza que modifique los procedimientos administrativos para que 30 mil lotes y aproximadamente 4.000 departamentos puedan estar en condiciones de acceder a los créditos hipotecarios que anunció el Presidente.
Además, los 5.000 millones de pesos en obras. La Municipalidad de Córdoba tiene en marcha más de 150 frentes de obra, en el marco de la Recuperación Histórica. Obras de iluminación, pavimento y desagües, redes sanitarias y de gas y cloacas. Los cuatro nuevos Parques Educativos, el sistema de alumbrado público ya cuenta con más de 120.000 luminarias, pasamos de 1.850 cuadras en cinco años, a 1.433 en solo uno, el proyecto del Nudo Vial Plaza España, Museo de Arte Contemporáneo y Parque Sarmiento que esperamos inaugurar para los 100 años de la Reforma Universitaria. Ya construimos 220 viviendas con fondos propios y ahora, junto al Gobierno nacional, en una primera etapa, se van a construir 675 viviendas en el marco del programa “Techo Digno”.

El PRO sostiene que el primer lugar será “amarillo”

A pesar de la afirmación del intendente Ramón Mestre, en el PRO aseveran que la decisión del macrismo de encabezar la lista ya está tomada desde Casa Rosada y hoy se impulsa a
Héctor Baldassi en el primer escalón. Es más, hasta se analiza que los lugares que reclama el mestrismo le serían otorgados a las mujeres y desde Nación impulsarían a Gabriel Frizza, el intendente de Jesús María, o a Rodrigo De Loredo, para completar la nómina de postulantes a la Cámara baja. Algo que será objetado desde el entorno del intendente capitalino y abriría el escenario a un nuevo terreno en la negociación.
En tanto, el Frente Cívico, el tercero en la alianza, contó durante el fin de semana con la presencia de Luis Juez en Córdoba. El embajador en Ecuador tendría el regreso asegurado desde Quito, pero no aterrizando en el Congreso. Su lugar estaría en un cargo en el Ejecutivo, más cerca que la Embajada en territorio ecuatoriano, pero no en la Cámara baja.