Otro mal paso de Instituto, otra vez de local, otra vez dudas en el juego y tres puntos que quedan en el camino. A pesar de la gran convocatoria y el apoyo en las tribunas, el equipo sigue sin acomodar las ideas y otra vez volvió a perder, esta vez contra un rival directo por la permanencia como Central Córdoba de Santiago del Estero, por 2 a 0.

Mereció el empate y lo gestionó. Pero los dirigidos por Lucas Bovaglio no consiguen despertar y deambulan por mitad de tabla, dejando pasar chances claras de crecer con la puntuación.

Siempre fue más el local, vale decirlo. Tuvo la pelota y la iniciativa pero nunca la profundidad. Y a decir verdad, la más clara en el primer tiempo fue ese error por querer salir jugando de Jorge Carranza, que no supo capitalizar Lucas Gamba, quien en vez de resolver eligió un pase con lo justo a un compañero que fue tapado por Mosevich. Pero más tarde Gamba tendría revancha.

Sin embargo, daba la sensación de que lo mejor para Instituto era cuestión de tiempo, con Lódico muy atento, con Graciani siempre presto para jugar y buscando el remate, y en los primeros 25 minutos del complemento Ledesma le tapó un fuerte remate a Bochi. Hasta hubo una jugada que pudo ser penal por pisotón y agarrón a Lódico pero el juez cobró tiro libre, que Santiago Rodríguez mandó por encima del travesaño.

Pero a este equipo todo le está costando el doble. Hubo un centro larguísimo de derecha a izquierda, toques cortos en el área entre Torres y Gamba y este último, con un toque leve y preciso, batió a Carranza para meter el 1 a 0 y silenciar.

Instituto no se quedó. Adrián Martínez tuvo un fuerte remate que pegó en el palo y con poco acorraló al rival. Faltó precisión en la definición y hasta repitió la fórmula con el ingreso agónico de Varela, en busca de algún cabezazo salvador como ocurrió ante Banfield. Y la tuvo en el segundo palo pero su toque se fue cerca del palo. Para colmo de males, un ex Instituto como Facundo Castelli fue clave en dejar pasar una pelota en una contra y Bezossi liquidó el pleito para el 2 a 0 final.

Esta vez no hubo milagro y tanto Instituto como Bovaglio lamentan la chance desperdiciada porque méritos hizo para empatar pero se queda sin nada.