Cultura. Música. Jazz. Barrio. Fútbol. Deportes. El Gigante. Lunas de Alberdi. Un combo que se viene dando en el popular barrio cordobés y que en los últimos días tuvo un ilustre invitado: Michael Tracy.
Tracy es uno de los más destacados profesores de jazz en Estados Unidos con más de 40 años de experiencia en la música.

Este embajador del jazz ha desarrollado diversos enfoques modernos en la enseñanza de la música, y eso fue lo que estuvo realizando en Córdoba. Ha establecido intercambios musicales y culturales en todo el mundo y en ese ámbito brindó una clínica en el Gigante. La clase duró dos horas ante una gran concurrencia de músicos y estudiantes de música.

La actividad fue organizada en conjunto por el Departamento de Cultura del CAB y Collegium CEIM.

Desde el club manifestaron que “fue un honor haber promovido este evento cultural, y recibir a este embajador del jazz”.
“Cuando surgió el primer contacto para la invitación, y le expliqué que era para el departamento cultural del club, y le conté de qué se trataba, se sorprendió mucho. Le contamos la historia del barrio, del club, el compromiso de Belgrano con la comunidad y el barrio y con el desarrollo sociocultural con la zona y se entusiasmó muchísimo con la idea. Para un músico de jazz del calibre de Michael Tracy es algo novedoso. Una vez en Córdoba, cuando conoció el estadio, pidió la camiseta de Belgrano. Apenas se la dieron se la puso y él mismo se le ocurrió pisar el césped. Entonces, fue con su saxo, la camiseta puesta y empezó a tocar”, explicó Daniel Corzo, que fue el promotor de esta visita al club Belgrano.

Momento mágico

El afamado saxofonista ha recibido varios reconocimientos en su carrera como el Alumni Service Award de la Facultad de Música en 1996, el University of Louisville Distinguished Faculty Service Award en el 2000, el Red Apple Award en 1999, ganador dos veces del National Endowment for the Arts Award, y el 2000 Who’s Who in Executives and Professionals y del 2005 Who’s Who Among America’s Teachers, y en 2014 recibió el University of Louisville Distinguished Faculty Service Award.
Pero más allá de esos premios, de Alberdi se llevará un recuerdo único.

“Hubo un momento mágico con un nenito, que está registrado en fotos y en un corto video. La cara de ese chico escuchando el saxo de Tracy no tiene precio, no tiene explicación, exime de toda palabra. Fue muy emotivo... Michael Tracy se fue muy contento y quedó muy impresionado. Fue una oportunidad muy especial”, relató Corzo.

El barrio y la música. Unidos. Porque el deporte y la cultura van de la mano. Esta fue otra muestra. Cabe recordar, que con el legado del Chango Rodríguez, se ha abierto desde hace un tiempo una propuesta cultural en el club denominado “Lunas de Alberdi”, que ofrece música en vivo en la renovada cancha de Belgrano. Y así, el Gigante sigue uniendo distintas expresiones.

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