Los visitantes extranjeros completamente vacunados tendrán permitido entrar a Estados Unidos a partir del 8 de noviembre, anunció este viernes la Casa Blanca.

"La nueva política de viajes estadounidense que requiere la vacunación para los viajeros extranjeros a Estados Unidos comenzará el 8 de noviembre", escribió en un tuit Kevin Muñoz, secretario de prensa adjunto de la Casa Blanca.

 "Este anuncio y fecha aplican tanto a los viajes internacionales por aire como por tierra. Esta política está guiada por la salud pública, es estricta y coherente", dijo Muñoz.

Un funcionario de la Casa Blanca dijo a CNN que los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos ya han informado a las aerolíneas que todas las vacunas aprobadas y autorizadas por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA), así como las vacunas de la Lista de Uso de Emergencia de la Organización Mundial de la Salud, serán aceptadas para los viajes aéreos con destino a Estados Unidos.

"Anticipamos que lo mismo ocurrirá en la frontera terrestre", dijo el funcionario.

Los ciudadanos no estadounidenses tendrán que presentar pruebas de que están vacunados por completo y un resultado negativo en una prueba realizada 72 horas antes de abordar un vuelo con destino a Estados Unidos, dijo el mes pasado Jeff Zients, coordinador de la respuesta a la COVID-19 de la Casa Blanca.

Los viajeros internacionales vacunados por completo que entren a Estados Unidos ya no tendrán que someterse a una cuarentena de 14 días después de su llegada, indicó Zients.

En cuanto a los estadounidenses no vacunados que regresen a Estados Unidos, el coordinador dijo que estarán "sujetos a requisitos de realización de pruebas más estrictos", incluyendo una prueba realizada un día antes de la partida y la demostración de que han comprado una prueba para aplicársela al llegar a Estados Unidos.

La flexibilización de las restricciones de viaje pondrá fin a una mezcolanza de prohibiciones impuestas por la administración del ex presidente Donald Trump desde el inicio de la pandemia a los viajeros procedentes de 33 países de todo el mundo.

También dará finalmente la oportunidad de reunirse con su familia a las personas en el extranjero que quedaron separadas de sus familiares.

Se espera que las nuevas reglas reduzcan una importante fuente de tensiones entre Estados Unidos y Europa, la cual se quejó de la vacilación de Estados Unidos para eliminar las medidas en medio del alza en las tasas de vacunación.

Las nuevas reglas también fueron aplaudidas por la industria de viajes estadounidense que estuvo cabildeando ante el Gobierno federal para que realizara los cambios.