La presidenta autoproclamada de Bolivia, Jeanine Añez, volvió a marcar su distancia con el presidente electo Alberto Fernández, pero señaló que ambos países "se necesitan". 

En una entrevista con Infobae, Añez señaló: "Si bien no compartimos ideología con Alberto Fernández, tenemos mucha relación con Argentina. Son nuestros clientes en la compra de gas, como lo es Brasil. Los negocios deben estar al margen de la ideología política. Ambos países nos necesitamos". Y agregó: "Todo lo que se vaya a avanzar, que sea en el ámbito de mutuo respeto y de lo que les conviene a Bolivia y a Argentina, sin que tengan que ver nuestras ideologías políticas". 

Por su parte, la funcionaria de facto volvió a negar el golpe de Estado en Bolivia y dijo haber actuado "conforme a la norma": "La Constitución establece que ante la ausencia de una autoridad debe haber sucesión constitucional, Evo Morales se fugó del país. Primero presentó su renuncia y luego se fugó del país. Había una ausencia de autoridades, por una serie de renuncias, y recayó en mí de acuerdo a la Constitución". 

Añez argumentó que Evo Morales "tiene deudas pendientes por hechos de corrupción, por fraude electoral y ahora debe responder por terrorismo". "Solo piensa en el poder y eso es canallezco, es una actitud perversa", dijo.

Sobre el pedido desesperado de millones de bolivianos de que se retiren los militares de las calles, Añez dijo que "era necesario", y aseguró que "el pueblo y la Policía fueron testigos de la desesperación con la que se pidió a las Fuerzas Armadas que ayuden a enfrentar los hechos de terrorismo y vandalismo". 

"La Policía había sido rebasada y no tenía condiciones para proteger a la gente. Había un escenario dramático. Si no hay terrorismo ni vandalismo, no hay necesidad de que el ejército salga a las calles. Con ese decreto pedimos a los militares que acompañen a la Policía. Si no hay necesidad, si la paz vuelve al país de manera inmediata, el decreto se abroga. La calma vuelve y ese decreto se va a derogar", aseguró.