Una tradicional y controvertida celebración de los alumnos del último año de un secundario de la localidad cordobesa de Colonia Caroya terminó el martes en disturbios y en una suspensión masiva.

El hecho se produjo alrededor de las 7 del martes en el IPEM Nº 165 Presbítero José Bonoris, cuando los estudiantes de sexto año concurrieron a la puerta de ingreso luego de un evento denominado “la teñida”, en el que se colorean el cabello y asisten al colegio tras pasar la noche en vela.

Al llegar a la escuela, los jóvenes, que durante el festejo habrían bebido alcohol, rompieron un portón, mancharon a algunos docentes con espuma loca y bebidas, e impidieron el ingreso de otros alumnos y profesores.

Ante ese cuadro de situación, los directivos reclamaron la presencia de un móvil policial, que dispersó a los estudiantes que protagonizaban los disturbios.

En una concurrida reunión de docentes y padres, las autoridades decidieron suspender por tres días a la mayoría de los chicos y por cinco a los "más revoltosos".

Polémica carta de la directora

La decisión generó controversia, porque la directora del establecimiento había enviado una nota a los padres, en la que se les advertía que los chicos seguramente consumirían “alcohol u otra sustancia nociva para la salud” por lo que no se les permitiría asistir a clases, según publicó Radio Jesús María.

“El Equipo Directivo se dirige a ustedes a fin de comunicarles que los alumnos de sexto año, que tradicionalmente se tiñen el pelo, podrán venir el día martes 18 de abril a festejar en la vereda recomendándoles que se comporten adecuadamente evitando el uso de pirotecnia que los ponga en riesgo y moleste a los vecinos en horario tan temprano”, se leía en la carta.

En la misiva, se comunicaba a los padres que los alumnos no podrían entrar al colegio, porque, dada las características del festejo, estarían violando el código de convivencia de la institución. Además, se avisaba que no se les iba a computar el ausente a los jóvenes.