El intenso viento, abundante caída de agua y granizo que se desencadenó en la madrugada de este domingo ocasionó daños en diferentes localidades del interior de la provincia de Córdoba.

Decenas de árboles y postes del tendido eléctrico caídos, voladuras de techos, destrucción de alambrados y anegamientos temporales fueron la consecuencia del vendaval, aunque según se aclaró desde el Gobierno de la Provincia, sin consecuencias para los pobladores de las distintas regiones.

Ante la magnitud del suceso, los ministerios de Gobierno y Desarrollo Social, a través de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático y Catástrofes, mantuvieron y permanecen en contacto permanente con los municipios afectados, que con el correr de las horas, realizarán las evaluaciones correspondientes a los fines de poder determinar la magnitud de los daños.

El relevamiento permitirá disponer de la la utilización del Fondo de Catástrofes y Desastre y la transferencia de dinero a los municipios afectados, y, luego de la evaluación de daños realizada, se brindará asistencia a las familias de las viviendas afectadas.

Una de las localidades más afectadas fue Cavanagh en donde hubo daños en el corralón municipal, voladuras de techos de viviendas particulares, postes y árboles caídos sobre la vía pública.

También en Guatimozín cayeron árboles y un vehículo sufrió daños por el desplome de un poste de alumbrado. El mismo tipo de consecuencias padecieron los vecinos de Corral de Bustos.

En Cruz del Eje, Colonia Caroya, Jesús María y Sierras Chicas el panorama fue similar al del sureste provincial: postes de alumbrado y de telefonía, árboles, pilares de luz y alambrados tirados en las calles, cables de energía eléctrica cortados, árboles y grandes ramas interrumpiendo el tránsito y algunas casas particulares con daños, aunque siempre sin consecuencias personales.