¡Desde Atlético Calchín al mundo!
Partido a partido, cada vez que tiene la posibilidad de jugar unos minutos en el primer equipo de River, Julián Álvarez demuestra que es un fenómeno.
El pibe de 18 años oriundo de Calchín (localidad de unos 2.500 habitantes, ubicado a 110 kilómetros de la Córdoba Capital) tiene una gran historia.
Ya conoce las instalaciones del Real Madrid, jugó en el equipo español, y ahora viaja con el plantel "Millonario" para jugar la final de la Copa Libertadores de América en el Santiago Bernabéu.
Nacido el 31 de enero del año 2000 en Calchín, la "Araña" acumula muchas experiencias en su corta carrera: a los once años pasó pruebas para River y Boca, pero en esta última lo vio un ojeador de Real Madrid que lo llevó a España a probar suerte. Incluso, en ese momento fue tentado por el Barcelona.
El cordobés jugó campeonatos infantiles en Real Madrid. Tenía once años y recién a los 13 años el club español podía ficharlo definitivamente. Para hacerlo en ese momento, se tenía que trasladar toda la familia y él tomó la decisión de volverse a Córdoba.
Luego de volver a su lugar natal, Julián siguió jugando al fútbol en su club de origen y continuó haciendo pruebas. Fue así que llegó a Boca y también estuvo en Argentinos. Pero no se quiso quedar.
El cazatalentos Piero Foglia, que hoy es el director deportivo del Deportivo Atalaya, fue clave en el proceso de formación del "Arañita" acompañándolo en las diversas pruebas.
A fines de 2015 se probó en River. Y claro, quedó. En enero de 2016 se fue a Capital Federal. Se hospedó en la pensión del club porteño.
"Me vieron en una prueba de jugadores Sub-15, en Embalse, y me dijeron si quería venir a River. No lo dudé porque ya era más grande y sabía que las oportunidades se me iban a acabar. Además, mi familia me apoyó totalmente y eso terminó de inclinar la balanza para que hoy esté acá", supo contar el "Arañita" tiempo atrás.
Y comenzó a destacarse en la Séptima (14 goles convirtió con esa divisional "millonaria"), luego saltó a Sexta y duró poco hasta que Luigi Villalba lo convocó para sumarse a la Reserva.
El 2018 fue el más vertiginoso: se ganó su primer contrato hasta 2021 , con cláusula de 15 millones de euros , viajó a Rusia como sparring para entrenarse al lado de Lionel Messi .
Y deslumbró a Marcelo Gallardo, que lo hizo debutar en el primer equipo y, además, lo incluyó en la lista de buena fe de la Copa Libertadores de América.
Cada vez que juega deja pincelazos de su gran fútbol. El cordobés es un jugador para seguir muy de cerca, un fenómeno con un tremendo futuro.
¿Y si escribe una página importante en el Bernabéu?