La fuerte recesión económica golpea la recaudación de la Provincia

La contracción de la actividad económica está esmerilando la recaudación de la provincia de Córdoba. Así lo muestra el último informe oficial del Gobierno provincial en donde reportan que los recursos tributarios que ingresaron en julio a las arcas del Estado provincial fueron un 15% menores a los percibidos hace exactamente un año atrás. De hecho, se trata de uno de los peores julios de la última década, solo superado por el año de la pandemia dura en donde las medidas sanitarias hundieron la actividad extraordinariamente.

Si ponemos la lupa sobre el origen de los tributos vemos que el 60% los explican impuestos nacionales y el resto son gravámenes de origen provincial. Ahora bien, la caída de los recursos fiscales de julio obedeció a un desplome tanto de las contribuciones nacionales como así también de las que tienen origen provincial. Por el lado de los primeros, los coparticipables, los que más se contrajeron fueron Ganancias con una caída interanual de 24% seguido por el IVA que tuvo una contracción real de 11%.  

Por el lado de los tributos de origen provincial se destacó la contracción del gravamen sobre los Ingresos Brutos con un rojo de 13 puntos porcentuales. Vale destacar que, si bien no es el tributo que más cayó, es el que tiene mayor incidencia. Casi 8 de cada 10 pesos de los impuestos provinciales que recauda el fisco son generados por Ingresos Brutos. En efecto, su caída genera un impacto de magnitud en la recaudación cordobesa.

La estructura tributaria es un lastre para la recesión

Como podrán advertir, la estructura tributaria depende exclusivamente de impuestos que gravan la actividad y no los patrimonios. Tanto IVA, como Ingresos Brutos, Ganancias o Sellos apuntan a las transacciones económicas. Estos representan más del 80% de los recursos impositivos, según estimaciones oficiales. Esto significa que la parte del león de los recursos fiscales depende del nivel de actividad económica. En otras palabras, a mayores transacciones más se recauda, contrariamente, cuando el nivel de actividad cae también lo hace la recaudación.

De lo anterior se desprende que los números en rojo que publicó el fisco local no son solo un fenómeno de julio, sino que se vienen arrastrando a la par de una recesión de larga data que se profundizó desde diciembre último. Esto redunda en un gobierno con menor capacidad para invertir en infraestructura ni estimular la actividad de la mano de obra pública.

La industria trabaja a media máquina

Si sacamos la lupa del síntoma (la caída de la recaudación) y observamos lo que ocurre con la actividad nos encontramos con la causa. Los datos aportados por el Gobierno nacional en la última semana continúan siendo negativos y ponen un signo de interrogante respecto al piso de la recesión. En lo que respecta a la industria, está utilizando apenas arriba de la mitad de su capacidad instalada, 14 puntos porcentuales menos que hace un año atrás, según Indec.

En Córdoba, la realidad productiva tiene sus claroscuros, mientras algunos sectores muestran atisbos positivos, otros continúan depresivos. En diálogo con LNM, Luis Macario, presidente de la Unión Industrial de Córdoba, señaló que en el sector metalmecánico “hay preocupación”, mientras en otros sectores la caída es menor a lo previsto. Si bien no todo puede atribuirse a la situación del país ya que depende mucho de las decisiones productivas de las terminales automotrices, señaló, hay caídas importantes.  

“En algunos casos, la caída productiva es de 50% aproximadamente respecto al año pasado, con indicios de que siga así para el 2025, por lo cual se prevé un ajuste de recursos”, destacó Macario. Por otro lado, también “hay terminales” que menguaron su producción, pero con una caída “no tan marcada”, explicó el presidente de la UIC.

Solo hay obra pública provincial en Córdoba

No es sino en el sector de la construcción en donde se nota con gran claridad los efectos procíclicos del esquema de recaudación de la Provincia (también lo es la estructura tributaria nacional). Una magra recaudación condiciona el esquema de obra pública y la infraestructura disponible. Sobre esto, el presidente de la Cámara de la Construcción de Córdoba, Horacio Berra, comentó a LNM que, por el parate de la obra nacional, el sector se está manteniendo de la mano de obras de la provincia que “tiene una mirada muy distinta hacia nuestro sector”.

Si bien el dirigente de la construcción destacó que la Provincia cumple los contratos y pagos “a rajatabla”, respetando las ejecuciones “dentro de lo previsto”, lo cierto es que la recesión y caída de la recaudación condicionan al sector. El volumen y magnitud de las obras tiene “un nivel menor a lo que fue el año pasado”, con lo cual, dado que “las obras se empiezan a terminar”, esperan que se active un nuevo “plan de obras”, aclaró Berra.

¿La recesión tocó fondo?

Los datos aportados por consultoras privadas y organismos públicos no son alentadores en lo que respecta al fin de la recesión que esmerila la recaudación. Por caso, un informe del Ministerio de Capital Humano revela que en lo que va de gobierno anarco-libertario más de 600 mil personas dejaron de aportar al régimen de seguridad social, entre asalariados formales e independientes. 

En consecuencia, el consumo masivo continúa deprimido y aún no da señales de recuperación pese al amesetamiento de la inflación. Esto se observa en los niveles de consumo masivo que acumulan una retracción en torno a 10% en lo que va del año que también sacude a las primeras semanas de agosto que continuaron depresivas, según la consultora Scentia.