El arquero de Talleres Guido Herrera es la voz experimentada del plantel y asume con madurez esa situación. Es que en este mercado de pases se habló de una inminente venta la mercado europeo, situación que por su edad se ve con buenos ojos (27 años). No obstante, al no encontrar posibilidades o sin poder concretarse, lejos de frustrarse, digiere todo con su profesionalismo habitual.

A la salida del vestuario, lejos de confrontar, ante la consulta sobre su futuro, declaró: "Yo tengo la cabeza puesta en Talleres, siempre, incluso desde cuando sonaba mi chance de ser vendido. Es un honor esta camiseta. Talleres es mi laburo y lo voy a respetar siempre, pensando en el torneo y en hacer el mejor papel en la Superliga".

"Es bueno empezar ganando siempre, fuimos oportunos y Vélez no nos generó tanto, casi nada diría yo", agregó Herrera. "No fue un partido fácil, metimos intensidad y juego, lo importante es arranca con un triunfo para hacer el mejor papel. Falta mucho y vamos a seguir mejorando", destacó.